A su vuelta a San Petesburgo, en 1903, es recibido como un santo. Y son tan apreciadas sus cualidades, que en 1908, es presentado a la esposa del zar, con la intención de curar al hijo heredero de la corona.
Gracias a su éxito, Rasputín llegó a poseer una gran influencia sobre los reyes. En especial,sobre la zarina Alejandra Fiódorovna. Llegando a poseer el completo control del gobierno.
Un complot ante tan descabellada situación, tuvo como desenlace, el terrorífico asesinato de Grígori Rasputín. El cual fue envenenado, golpeado brutalmente, tiroteado y arrojado al río. La increible envergadura y fuerza de este hombre, impidió que tuviera una muerte rápida. Lo cual, ha influido para magnificar la leyenda de este temido personaje.
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